Episodio 361: La maldición de Damien

 

Título original: Damien: Omen II (1978)

Directores: Don Taylor y Mike Hodges

Intérpretes:

William Holden...................Richard Thorn

Lee Grant............................Ann Thorne

Jonathan Scott-Taylor.........Damien Thorne

Secuela de uno de los grandes clásicos del cine de terror y del que ya hablamos en su día aquí.

En este caso, y al igual que pasa con otras secuelas donde la primera parte es una obra maestra, nos encontramos con una película que, sin estar a la altura de la original, sí que es un gran producto digno de pertenecer a la franquicia.

Han pasado 7 años desde los acontecimientos narrados en la primera película, y Damien vive ahora con sus tíos y su primo. Tanto él como su primo acuden a una academia militar para su educación, pero entonces a Damien le será revelada su verdadera naturaleza y propósito, y todo aquel que ose interponerse en su camino acabará bastante desvivido (como se dice ahora para evitar la censura).

Mira mi truco mental de Jedi

Dirigen Don Taylor y Mike Hodges, el segundo de ellos sin acreditar debido a que fue sustituido por Taylor al poco de empezar el rodaje. Según se dice, fue debido a diferencias creativas, y es que el estudio no estaba contento con el trabajo de Hodges, ya que decían que tardaba demasiado en rodar y les daba miedo que se pasaran del presupuesto y del tiempo establecido. Eso sí, no todos estuvieron satisfechos con el nuevo director, ya que, según comentó Lance Henriksen, Taylor cortó gran parte de su participación en la película.

A la cabeza del reparto encontramos a dos grandes ganadores del Óscar como fueron William Holden y Lee Grant. Holden había rechazado el papel del padre de Damien en la película original, ya que no le gustaba la idea de participar en una película que hablara sobre el diablo, pero visto el éxito que tuvo, se aseguró de no perder el papel principal en ésta. Lee Grant accedió de primeras a su papel, ya que era una gran admiradora de la película de Donner.

Para mí un gran acierto fue la elección de Jonathan Scott-Taylor para el papel de Damien, ya que creo que guarda un gran parecido con Harvey Stephens, el niño que interpretó a Damien en la primera parte.

Para esta película no regresó David Seltzer para escribir el guion, ya que, según él, no le interesaba escribir secuelas. Tras ver la película declaró que si él la hubiera escrito, la habría situado al día siguiente de los hechos principales, con Damien ahora viviendo en la Casa Blanca.

La crítica la recibió de una forma más tibia que la primera, con reseñas bastante mixtas. Yo, como dije al principio, sí que creo que es una secuela bastante digna, aunque sí le achacaría que la trama avanza muy poco y casi toda la película es una sucesión de muertes a lo Destino Final desde el principio hasta el final. Pero con la banda sonora del gran Herry Goldsmith se perdona eso y mucho más.