Episodio 231: Gothic

Título original: (Gothic (1986)

Director: Ken Russell

Intérpretes:

Gabriel Byrne......................Lord Byron

Julian Sands.........................Percy Shelley

Natasha Richardson.............Mary Shelley

Timothy Spall......................Dr. Polidori

Entre los amantes de los cuentos de terror del S.XIX es bien conocida la historia de cómo una noche se juntaron estos cuatro personajes que tras contar historias de fantasmas, decidieron escribir las suyas propias, una cada uno, que acabaría siendo recopilado en el libro Fantasmagoriana.

Esta película trata de eso, o al menos eso creía yo. En su lugar lo que nos cuentan es una libertina estancia más de unos personajes que vivían bajo la losa de su propios ideales y ayudados por el opio y el láudano.

Percy y Mary llegan con la hermanastra de ésta, Claire, a la mansión donde el poeta Lord Byron se ha retirado junto con sus sirvientes y su médico el Dr. Polidori. Allí, tras comportarse como niños estúpidos durante un tiempo, deciden hacer una sesión de espiritismo. Pero algo no sale como esperaban, y una extraña entidad parece acechar ahora la mansión y haber tomado posesión de Claire con la idea de enloquecerlos a todos hasta la muerte.

Esos grupos de los 80 que murieron antes de nacer

Al mando de todo está Ken Russell, un prolífico director con una variada carrera que toca casi todos los palos habidos y por haber.

Al frente del reparto está Gabriel Byrne, bien conocido por todos y que ha participado en películas como Sospechosos habituales, El hombre de la máscara de hierro o Muerte entre las flores. También lo pudimos ver haciendo del diablo en El fin de los días.

Le acompaña Natasha Richardson, la que fue esposa de Liam Neeson y que tristemente falleció debido a las heridas sufridas en un accidente de esquí.

No os voy a engañar, la película es bastante bodrio. Te pasas media película queriendo abofetear a los protagonistas, y la otra media deseando que aparezca algo y los mate para no tener que abofetearlos. Es como si vieras Mozart pero con cuatro de ellos.

Además la ambientación no está muy bien conseguida. Mientras que los exteriores sí reflejan una buena mansión, la mayoría de las estancias del interior parecen una casa de pueblo a la que le han añadido cortinajes, en parte para intentar hacerla más elegante y en parte para intentar ocultar otras cosas.