Título original: Besökarna (1988)
Director: Jack Ersgard
Intérpretes:
Kjell Bergqvist...................Frank
Lena Endre.........................Sara
Johannes Brost...................Allan
De Suecia nos llega esta película sobre una casa habitada por fantasmas (o eso creo).
Una película que, no voy a mentir, promete mucho pero no da nada. Y es que su arranque es prometedor, pero siempre que parece que va a pasar algo, no pasa nada, y cuando te das cuenta, ya estás casi al final del metraje.
Frank y Sara son un matrimonio estadounidense que se muda a Suecia con sus hijos por una oportunidad de trabajo de Frank. Al menos eso entendí yo, que puede que me equivoque, porque a mí se me hace raro que todo el mundo se entienda como si nada. El caso es que su nueva casa en el campo es muy bonita, pero pronto Frank se da cuenta de que en el desván pasa algo raro. La puerta siempre aparece abierta, y en el interior hay una puerta que es incapaz de abrir. Un día decide llamar a un experto parapsicólogo para que le ayude.
La penúltima y nos vamos a casa
Dirige y debuta Jack Ersgard, responsable de truños como Mandroid.
Poco me voy a esforzar en hablar de los actores, ya que ni siquiera sé si son conocidos en su país natal.
Como he dicho, la película promete pero no da nada. Todo el rato tienes la sensación de que te estás perdiendo algo, porque la película avanza sin que tú veas que pase nada, pero los personajes parece están pasando por algo que tú no terminas de entender.
Y es que cuando digo que no pasa nada, es que no pasa nada. El protagonista llama a un parapsicólogo en busca de ayuda, y juntos investigan y se acojonan, pero es que, de verdad, que no ha pasado nada. Una puerta abierta y poco más no es motivo para creer que tu casa esté encantada. Quizás exista una versión del director que yo desconozco y en donde sí pase algo.
Además el climax es bastante malo también, y para mí todo un chasco. Pero bueno, en tu mano está verla o pasar de ella.
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