Título original: The children (1980)
Director: Max Kalmanowicz
Intérpretes:
Martin Shakar.............John Freemont
Gil Rogers..................Sheriff Hart
Gale Garnett...............Cathy Freemont
Nos encontramos ante una película que no tiene miedo a copiar lo que le apetezca de otras películas de terror, y no con poco descaro. Llamémosle descaro o llamémosle homenaje, nunca he sabido discernir por qué unas cosas son uno y otras el otro.
Pero el caso es que, cortando en cachitos varios guiones, metiéndolo en un saco y sacando páginas al azar, se puede crear un guion para una nueva película, como es el caso que nos ocupa. Y con esto no digo que la película sea un bodrio (tampoco es que sea una maravilla). Es más, la película, sin ser la panacea, es un pequeño disfrute de tópicos ochenteros no muy mal llevados.
En el pequeño pueblo de Ravensback se produce una fuga en una planta de energía, provocando una nube de gas tóxica que se expande por un tramo de carretera. Es por ese tramo que justo atraviesa un autobús escolar regresando de la escuela con unos pocos niños, haciendo que éstos se conviertan en una especie de zombies que son capaces de derretir a la gente de un abrazo. Un abrazo mortal.
Qué villancicos tan alegres
Dirige Max Kalmanowicz, en la que fue su primera y penúltima película tras las cámaras. La otra, por cierto, fue Dreams come true, una película sobre una pareja que decide meterse en el mundo de los viajes astrales para hacer mucho el amor (sic).
De los actores principales nada reseñable. De hecho, según IMDB, ésta es una de sus películas más conocidas.
Antes hablábamos del potpurrí de ideas aquí mezclado y servido. Entre ellas podemos ver una historia muy parecida a la de El pueblo de los malditos o ¿Quién puede matar a un niño? (Por lo del grupo de niños cabrones). Los acordes más conocidos de Psicosis se pueden encontrar por ahí metidos también. Música, por cierto, creada por Harry Manfredini, compositor de la conocidísima banda sonora de Viernes 13. La música de esta película no te va a pasar nada desapercibida, porque tiene pasajes que parecen sacados tal cual de Viernes 13. Y lo más curioso de todo es que esta película (la del abrazo) se estrenó un par de meses antes. Otro plagio/homenaje: si buscas , en algunos carteles aparece un hombre en llamas, sacado directamente del cartel de Scanners (en IMDB, sin ir más lejos).
Como mencionaba antes, es una película de horror, pero no es un horror de película (estoy chistoso hoy). Se deja ver sin demasiado aburrimiento, y algunas escenas tienen su gracia. Los gritos de los niños cuando mueren recuerdan a gatos en celo, y de hecho he buscado y efectivamente, los hicieron con maullidos de gatos en celo. En fin, el resto de cosas os dejo a vosotros que las descubráis. ¡A ello!
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