Episodio 79: Mondo zombie

Título original: The dead next door (1989)
Diretor: J. R. Bookwalter
Intérpretes:
Pete Ferry...............Raimi
Bogdan Pecic.........Dr. Moulsson
Michael Grossi......Mercer

Nos encontramos ante una película ante la que no sé cómo reaccionar. A ver si consigo hacerme entender: Durante mi juventud (o al menos así lo recuerdo) Braindead abrió la veda de las películas gore, y acabaron llegando a los vídeoclubs títulos como el ya mencionado, Darkness, o la que nos ocupa en esta entrada.

Recuerdo haber visto el cartel en el vídeloclub y ese título tan extraño que ni siquiera a día de hoy sé qué coño quiere decir ¿Mondo zombie? El caso es que por algún motivo a mí se me metió en la cabeza que eso era una película de culto y muy querida por los amantes del cine de terror. No conseguí verla en su día, y pasaron muchos años hasta que lo conseguí. Y joder, menudo truño más barato. Lo siento, sé que habrá gente que la adore, pero a mí me pareció patética de principio a fin.

Un brote zombie se desata y 5 años después la humanidad está plagada de zombies. Se ha creado una unidad especial para acabar con ellos, a la vez que existe un grupo sectario que cree en defender a los zombies. Mientras, existe también un científico que cree haber descubierto una cura para el virus. El caso es que acabarán todos mezclándose, con muchas dosis de sangre. Ése es a grosso modo el resumen, al menos como recuerdo yo, que ya digo que no me hizo mucho tilín y la tengo más fuera que dentro en mi memoria.

Joder, acababa de fregar...

J. R. Bookwalter se estrenó tras las cámaras con este film y su filmografía no ha ido por otros derroteros. Poco más voy a hablar de él o de los actores, ya que no los conoce ni su puta madre. Quizás el más conocido sea Scott Spiegel, que hace un pequeño papel y que es bastante asiduo a aparecer en las películas de Sam Raimi.

Y es que este film gira mucho en torno a Sam Raimi, ya que se nota muuuuucho que con esta película pretendía emular el éxito que consiguió éste con su ópera prima Posesión infernal. Pero claro, Bookwalter no es Raimi. De alguna forma, Bookwalter se las apañó para conseguir involucrar tanto a Raimi como a Campbell en esta película, pensando seguramente que eso le daría a la película un sello de calidad y que su carrera despegaría como un cohete, pero si hizo esto último, el cohete era el Challenger. Mientras que Raimi (que incluso un personaje es llamado así a modo de homenaje/declaración de amor) acabó dirigiendo súperproducciones como la trilogía original de Spiderman o Oz, el otro acabó abandonado la dirección en 2003 con películas como Deadly Stinger o Polymorph.

No he visto nada más de su filmografía (que yo sepa), pero viendo ésta, que se supone que es la buena, bastantes años estuvo en el negocio. Las actuaciones son poco menos que patéticas. Si te fijas en los actores, cuando no están interpretando sus líneas, la mayoría están en su mundo. La peli entera está grabada con una cámara Súper 8, que le da un aire de película casera que hace que no te la puedas tomar en serio. Hablando de tomar en serio: uno no sabe si determinadas escenas pretenden ser graciosas u homenajes o si se lo está tomando en serio y pretende que nos lo creamos. Pero claro, es difícil tomárselo en serio viendo que los zombies tienen el maquillaje sólo en la zona de la cara y las orejas, cuello, brazos, etc... siguen del color carne habitual.

Sinceramente, para mí es una película para el olvido, que no tiene ni siquiera el toque de serie B de las películas cutres de los 80 que al menos viéndolas te hace sentir nostalgia. Me valdría para un ejercicio de fin de curso hecho por colegas con ganas de pasarlo bien, pero no pasa de ahí.

Se que después de esto muchos me odiaréis, porque sí que parece que de alguna forma esta película tiene algo de culto, peeeero... para mí = caca.